La
buena Madre es aquella que se va volviendo innecesaria con el paso del tiempo. Ha
llegado la hora de reprimir el impulso natural materno de querer colocar el
pichón debajo del ala, protegido de todos los errores, tristezas y peligros. Es
una ardua batalla, lo confieso. Cuando empiezo a debilitarme en la lucha para
controlar la supermadre que todas tenemos dentro, me acuerdo de la frase del
título. "LA BUENA MADRE ES AQUELLA
QUE SE VA VOLVIENDO INNECESARIA..." Si realicé mi labor de madre
correctamente, tengo que volverme innecesaria. Y antes que alguna madre me
acuse de desamor, explico qué es lo que significa eso: ser
"innecesaria" es no dejar que el amor incondicional de madre, que
siempre existirá, provoque vicio y dependencia en los hijos, como si fuera una
droga, a tal punto, de que ellos no sean capaces de poder ser autónomos,
confiantes e independientes. Deben estar prontos para trazar su rumbo, hacer
sus elecciones, superar sus frustraciones y cometer sus propios errores
también. Con cada fase de la vida, una nueva pérdida es un nuevo logro; para
las dos partes: madre e hijo. El amor es un proceso de liberación permanente, y
ese vínculo no deja de transformarse a lo largo de la vida. Hasta el día en que
los hijos se vuelven adultos, constituyen su propia familia y recomienzan el
ciclo. Lo que ellos necesitan es tener la seguridad de que estaremos con ellos,
firmes, en el acuerdo o en la divergencia, en el triunfo o en el fracaso,
prontas para el mimo, el abrazo apretado, y el consuelo en los momentos
difíciles. Los padres y las madres, solidariamente, crían a sus hijos para que
sean libres y no esclavos de nuestros propios miedos. Es ese el mayor desafío y
la principal misión.
Cuando
aprendemos a ser "innecesarios", nos transformamos en un puerto
seguro donde ellos puedan atracar.
"A
quien ames dale: alas para volar, raíces para volver y motivos para quedarse”. Hagamos
hijos independientes y seguros de sí mismos para que vivan una vida plena y
honrada. “CUANDO UNA MADRE AMA DE VERDAD
EDUCA A SUS HIJOS PARA APRENDER A VOLAR”.