¡No
te avergüences de tu sensibilidad!
Te
ha traído muchas riquezas. Eres capaz de ver lo que otros no ven, sentir
lo que otros se avergüenzan sentir. Eres
más abierto, menos indiferente. Te
resulta más difícil hacerte de la vista gorda. Tú no has cerrado tu corazón, a
pesar de todo.
Eres
capaz de aceptar las altas más intensas y las bajas más oscuras en
tu amoroso abrazo. (Sabes que
ninguna te define. Que todo pasa. Que eres un cuenco cósmico.)
¡Celebra tu sensibilidad!
Te
ha mantenido flexible y abierto. Te ha permitido estar cerca del milagro. Y
la presencia consciente brilla en ti con toda intensidad. No te compares con
los demás. No esperes que ellos te
entiendan. Sin embargo, sí puedes enseñarles:
Que
está bien sentir, profundamente.
Que está bien no saber.
Que está bien no saber.
Que
está bien jugar en el borde más crudo de la vida.
La vida podrá parecerte “dura”,
a veces, y a menudo sientes que te puede abrumar. Pero es aún más duro reprimir
tus abrumadores dones.
A los que son más sensibles:
¡Traigan
un poco de dulzura a este cansado mundo!
¡Sigan
brillando con sensibilidad valiente!
¡Ustedes
son los portadores de la luz!
Jeff
Foster
Fuente: Facebook: Jeff-Foster en español