Todavía
la frágil quemadura de una lágrima
borra la luz del árbol.
Todavía
cerca del corazón se detiene la vida
cuando te nombra alguien.
Todavía
rueda el mundo al vacío
desprendido y errante.
Todavía
no encuentro las palabras
para decir la ausencia de tus manos.
Todavía te amo.
Autor: Maruja Vieira
Todavía es siempre.
ResponderEliminarSiempre todavia.
Gracias por este hermoso poema
(todavia rueda el mundo al vacio, desprendido y errante...)
Uuhj!.
un abrazo.
Que bonito blog
ResponderEliminarpasaré si me lo permites, todavía hay seres como tú
Todavía
rueda el mundo al vacío
desprendido y errante.
y rodamos con él todavía
Se perdió mi comentario ?
ResponderEliminarno importa, no era su momento todavía
Feliz día